En recuerdo de Jorge Molina Villegas, maestro de la publicidad colombiana
El 14 de marzo falleció el mentor de innumerables publicistas en el país. Un homenaje a un grande de la industria.
Sonriente, siempre elegante y agudo. Así era Jorge Molina Villegas, experto en branding y uno de los publicistas más importantes de la historia colombiana.
Al navegar las redes sociales, los mensajes para Molina son cientos. Son mensajes de agradecimiento, de admiración y, sobre todo, de cariño hacia un hombre que pavimentó el camino para lo que es la publicidad hoy en el país.
Su libro, Viva la publicidad viva, es considerado uno de los pilares del cánon publicitario en Colombia. Es un libro donde Molina Villegas explica de forma detallada y con ejemplos los conceptos básicos del fortalecimiento de marcas a través de elementos obligados como el universo digital, los nuevos medios, el storytelling y el advertainment.
Una de sus frases características era “todo lo que vos te podás imaginar”, refiriéndose a quién era. Y sí, Molina era todo lo que se pudiera imaginar: lector, amante de la ópera y el teatro, cultor de la comida gourmet, hombre con criterio y publicista imaginativo, poeta, escritor y amigo.
Molina era de Medellín y tenía el acento de paisa indiscutible. Políticamente incorrecto, su pasión por la publicidad era tal, que conversar con él era recibir una clase de publicidad.
Hoy lo recordamos con testimonios de algunas de las personas que fueron sus amigos y sus alumnos:
Socorro Jaramillo, Publicista, Estratega de Marca y Profesora de Publicidad en el Top10 P&M 2021:
“Jorge Molina fue un hombre espléndido en todo el sentido de la palabra , abogado de profesión y publicista de corazón . Del derecho, que jamás ejerció, heredó el ser un hombre muy justo y de la publicidad, que fue su verdadera pasión, la creatividad; él en sí era un derroche de creatividad .
Amaba la ópera y la buena mesa, en su casa se comía delicioso y nos deleitaba con su conversación, era un hombre muy culto, muy atento y exquisito como ninguno.
Juanita Michelsen, quien era la Decana de la Facultad de Mercadeo y Publicidad y Jurgen Chiari, el Vicerrector Académico del Politécnico Grancolombiano, nos invitaron a ser parte del equipo de profesores de la Facultad de Mercadeo y Publicidad, y a hacer lo que en otra universidad no nos habían permitido, que eran unos talleres creativos disruptivos, con marcas de categorías diferentes que en ese momento eran Tabú (condones, sida, funerarias, etc) y así retar el pensamiento creativo de los alumnos.
Eran jornadas impresionantes en las cuales el rigor estratégico y las ideas mandaban. Los alumnos pasaban días y noches enteras analizando el brief, creando y preparando la campaña, y nosotros con ellos, era una época fascinante.
Años después, siendo yo Decana de la Facultad de Publicidad Profesional de la Universidad Central, tuve el privilegio de tener a Jorge como uno de los profesores invitados de la Facultad.
Jorge fue mi mentor, el colega que me hizo amar más esta profesión, y como amigo me enseñó a disfrutar mucho la vida pues junto a él escribí gran parte de mi historia, pues compartimos momentos únicos que hoy en medio de la tristeza de su partida me hacen celebrar su vida con un martini, como él quería que fuera su despedida”.
Germán Puerta, Director General Pezeta Publicidad:
“Un ser humano sorprendentemente imprevisible, polifacético e integral. Una personalidad arrolladora. Que nunca podría pasar desapercibida. Un paisa, pero nacido en Barranquilla, abogado de profesión, pero publicista, mercadotecnista, estudioso de la ópera, del dry martini y de la cocina de actividad. Sibarita, gocetas y al mismo tiempo disciplinado, estudioso y consagrado. Muy inteligente, Ingenioso, creativo. Generoso y detallista como el que más. El mejor conversador conocido. No se andaba con rodeos o era el mejor amigo de sus amigos o el primero en dejar de serlo implacablemente ante el menor asomo de deslealtad.
Podría tratarse de una de las personas que más le ha aportado a la publicidad en toda su historia. Como catedrático. Formó desde varias universidades a un sinnúmero de publicistas que dan fe de la huella profunda de conocimientos sobre la profesión y la impronta de aspectos humanos que lo destacaron no como un profesor corriente sino un potenciador del ser humano. Las cuatro ediciones complementarias de su obra Viva la Publicidad Viva, dan cuenta de la permanente investigación y estudio de los temas concernientes a la publicidad. Como director de cuentas las grandes agencias de los años 80, luego en su propia Molina y Asociados y luego en Asesoría directa y personal con marcas y empresas.
En todos los roles que Jorge desempeñó en mi vida: entrañable amigo, maestro, mentor, tutor, consejero, socio, confidente, compañero de juntas directivas, alcahueta, se desempeñó como pocos seres humanos se pueden encontrar en la vida.
Estoy plenamente convencido de la humanidad y profesionalismo de Jorge”.
Juanita Michelsen, abogada y publicista, ex directora de la facultad de Mercadeo y Publicidad del Politécnico Grancolombiano:
“Jorge Molina fue un hombre íntegro, generoso, querido y admirado por quienes tuvimos el privilegio de conocerlo, gran amigo, gran publicista y hombre de mercadeo, pero sobre todo un gran maestro que amaba lo que enseñaba, la belleza, la vida, la publicidad y el mercadeo.
Quería entrañablemente a sus alumnos en los que descubría a primera vista su valía, teniendo fe en su capacidad, en sus sueños, ideas y proyectos que respetaba e impulsaba para hacerlos realidad.
Fue un gran hombre de familia.
Fue, además, un gran publicista y hombre de mercadeo que dejó huella en las agencias donde ejerció y en su propia empresa donde asesoró a importantes empresas del país.
Formador de varias generaciones de profesionales que hoy lideran el mercadeo y la publicidad tanto a nivel nacional e internacional.
Aportó de manera invaluable y generosa a la creación y desarrollo del programa de Mercadeo y Publicidad del Politécnico Grancolombiano lo que contribuyó a su calidad y acreditación.
Autor del libro Viva la publicidad viva que es guía para quienes aspiran a seguir la profesión.
Jorge Molina me enseñó que los sueños se pueden hacer realidad, creyéndolos, con propósito, con claridad y sencillez, conociendo, admirando, con pasión.
Me enseñó a amar más la vida”.
Estos son testimonios que muestran a Jorge Molina Villegas como una persona destacada, querida y que será recordada por sus amigos, familia y alumnos.
¡Que viva la publicidad viva y qué viva Jorge Molina Villegas!